sábado, 24 de enero de 2015

Un amigo llamado Esfuerzo; y su amiga Recompensa

No me atrevo a afirmar rotundamente que "el esfuerzo siempre obtiene su recompensa", porque puede resultar hiriente para muchas personas que trabajan duramente cada día, sin ver alcanzados los éxitos que desean. Pero hoy así lo siento y así lo escribo. Creo que el esfuerzo, materializado en determinación, constancia, firmeza, perseverancia y mucho trabajo, al final sí da su fruto.

Hoy debo y quiero dedicar estas líneas a una gran persona, un trabajador determinado, a mi gran amigo Jesús. Diez años de trabajo le dan la enhorabuena y la bienvenida a una nueva vida. No ha sido ni mucho menos una recompensa obtenida de manera rápida, pero sí bien merecida. Quizás él dudó, en algún momento del camino, de su capacidad para conseguir lo que hoy ha conseguido. Es humano dudar y pensar en tirar la toalla.Y estoy segura de que en multitud de ocasiones de estos años, él ha pensado en tirarla, y bien lejos. La duda nos ayuda a valorar cuanto, realmente, deseamos alcanzar nuestro sueño. Y superarla, desde luego, nos hace más fuertes, más determinados y más decididos. Es justo esa decisión, conseguir aquello por lo que ha invertido tanto tiempo y tanta energía, lo que le ha llevado a Jesús a realizar su sueño, ser Notario.


Jesús Huerta Ramos en el acto de entrega de los Despachos de Notarios
Ayer, 22 de enero de 2015, finalizó una etapa de su vida, para dar comienzo a otra. Recibió por fin su Título de Notario, en un emotivo acto al que tuve el honor de acudir. Viendo tantas personas que han trabajado tantos años por un sueño cumplido, muchas reflexiones pasaron por mi cabeza. ¿Cuánto realmente quería yo aquellas cosas que no llegué nunca a conseguir?. ¿Cuánto estoy dispuesta a invertir por mis sueños?. ¿Cuánto creo en mis posibilidades?

Se me ocurre pensar que quizás cuando mi esfuerzo no ha dado su fruto ha sido porque mi determinación, constancia, firmeza, y perseverancia no han sido suficientemente fuertes. O simplemente porque aún no había llegado al final del camino, y debería haber seguido caminando, como ha hecho estos años el hoy "Ilustrísimo Señor Don Jesús Huerta Ramos", Notario. 

Por él, por lo que su vida me enseña, y por lo mucho que cuenta para mí, hoy sí quiero creer que "el esfuerzo siempre obtiene su recompensa".

Enhorabuena Jesús. 
¡Sigamos caminando!


INgente. Coaching interpersonal y desarrollo integral

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